¿Qué es una DAO?
El término DAO significa «organización autónoma descentralizada» y puede describirse como un protocolo de blockchain de código abierto que se rige por un conjunto de reglas, creadas por sus miembros elegidos, quienes realizan automáticamente determinadas acciones sin necesidad de intermediarios.
Las reglas de la DAO están integradas en un código informático que se ejecuta por sí mismo en función del comportamiento del protocolo. No es necesario interpretar estas reglas del programa porque se aplican automáticamente cuando se dan las condiciones especificadas.
Las reglas del programa y las acciones resultantes se registran en un libro de contabilidad blockchain transparente y seguro, que no puede ser alterado debido a las marcas de tiempo inmutables y a la distribución de información a los participantes de la red.
El concepto de DAO fue propuesto por primera vez por el fundador de BitShares, Steemit y EOS (Block.one) Dan Larimer en 2015, y perfeccionado por Vitalik Buterin de Ethereum en 2016.
Una DAO mantiene una red segura y optimizada sin requerir la intermediación manual de sus miembros. Los participantes no están vinculados por un contrato legal, sino que son incentivados por recompensas en forma de tokens de activos nativos que les ayudan a trabajar hacia un objetivo unificado.
Además, las reglas definidas por el protocolo o contrato inteligente guían el comportamiento de los participantes y ejecutan un consenso automatizado. Al no requerir la intervención de terceros, una DAO acelera las decisiones y acciones de la red y reduce significativamente los costos de gestión.
Por ejemplo, supongamos que una organización quiere distribuir fondos para un nuevo proyecto. En lugar de vadear la burocracia de la adquisición y asignación de fondos una vez que se concede la aprobación, la preprogramación de la DAO garantiza que los activos se distribuyan inmediatamente a las partes adecuadas sin necesidad de más administración o papeleo.
Con el fin de atraer la financiación necesaria para operar una DAO, el protocolo emitirá tokens de gobernanza a los inversores que representan no sólo la membresía, sino lo que es más importante, los derechos de voto (similares a los derechos de los accionistas) necesarios para hacer cambios en ella.
¿Cómo funcionan las DAO?
Las DAO pretenden imitar la estructura de una empresa en la que las normas y regulaciones se desarrollan utilizando código abierto y se hacen cumplir a través de contratos inteligentes.
Si no estás familiarizado, los contratos inteligentes son acuerdos programados para ejecutarse siempre y cuando se cumplan ciertas condiciones. Estas normas suelen ser decididas por las partes implicadas en la DAO.
A diferencia de las organizaciones tradicionales, en las DAO no hay jerarquía. En cambio, para alinear los intereses de la organización con los de sus miembros, las DAO fomentan una red distribuida de usuarios para lograr su objetivo.
Una de las principales características de una DAO es el capital interno que se utiliza para incentivar a estos actores y garantizar el buen funcionamiento de la organización.
Una vez que se ha establecido el conjunto original de reglas y se ha programado en contratos inteligentes, las DAO suelen entrar en una fase de financiación en la que puede participar cualquiera que desee acceder a ellas.
Gobernanza
Al final de la fase de financiación, el CAD se considera vivo y operativo, y todas las decisiones clave en torno a la organización son tomadas por los usuarios que llegan a un consenso sobre las propuestas.
Al mantener y bloquear criptomonedas en un contrato de votación, los usuarios tienen la oportunidad de votar sobre las propuestas, siendo el peso del voto proporcional a la cantidad de criptomonedas bloqueadas.
A continuación, la propuesta se implementa basándose en las reglas de consenso predeterminadas de la red, y los votantes son recompensados con criptomonedas adicionales por su participación.
DAOs y seguridad
Las reglas que rigen una DAO pueden ser muy complejas y difíciles de cambiar una vez que han entrado en vigor, ya que cualquier cambio requiere la redacción de un nuevo código y la aprobación de la red por consenso.
Esta incapacidad para reaccionar rápidamente a los errores de código hace que las DAO sean vulnerables a los ataques de los hackers, que podrían explotar los agujeros de seguridad y drenar los fondos de las criptomonedas.
El ejemplo más notable es, por supuesto, el hackeo en 2016 de «The DAO», un proyecto de crowdfunding que atrajo una financiación récord a pesar de varios fallos de seguridad documentados en su código. En aquel momento se robaron unos 3,6 millones de ETH y las consecuencias condujeron a una bifurcación dura de Ethereum para deshacer el hackeo, la razón por la que hoy tenemos Ethereum y Ethereum Classic.
DAO y DeFi
La mayoría de la gente conoció DAO a través de la plataforma de financiación colateral descentralizada Maker DAO o a través del hackeo de 2016.
Sin embargo, la explosión de los protocolos de finanzas descentralizadas (DeFi) ha provocado un aumento de la popularidad de los DAO en 2020, ya que muchas plataformas de agricultura de rendimiento e intercambio descentralizado (DEX) como Compound (COMP), yearn.finance (YFI) y Uniswap (UNI) confían en ellos para su gobernanza.
Dernière mise à jour le abril 22, 2022 por Laura